Este fin de semana ha sido bastante clompetito. El viernes quedamos con Rosa y Miguel en la creperie, para que nos contaran el periplo de su compañía de teatro por la galia, y ya aprovechamos para tomarnos unos crepes y beber bastante.... que calor que hacía el viernes por la ciudad.
El sábado salimos de aventura por el centro, principalmente a echar un vistazo a las rebajas, para evitar coger frío de la nevada que estaba cayendo acabamos comiendo en las castellana, un steak tartare que quitaba el sentido, aunque hay que reconocer que no mejoraba el del Figón de Triana, y hemos decidido volver pronto a degustarlo.
Por la noche paseito por el García Lorca para coger algo de fresquito y unas copillas con Dani y Nora que nos trajeron la invitación a su boda. Ya les queda poquito y de paso aprovecharemos el viaje para recorrer el Pais Vasco y La Rioja.
Ayer domingo acompañamos a la madre de Carmen al Fogón de Galicia. Como podéis suponer no tenía ninguna gana de ir, e hice de tripas corazón para comer unas zamburiñas y unas vieiras (uno que es un martir).
Intentamos ver el partido de Wimblendon, pero como se hacía eterno nos fuimos de cañas con Fito y Ada, al Poe (obviamente no faltó la tapa de feijoada y bacalao a la portuguesa). Volviendo a casa nos gritaron por la ventana de un piso y obviamente tuvimos que preguntar: Nadal había ganada a Federer.
Fin de semana brutal y hoy comienza la semana con las vacaciones en solo tres semanitas: Tarifa, Berlín esperadme que no tardo.
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