El sábado pasado estuvimos en el teatro viendo El Contrabajo de Rafael Álvarez el brujo. Es la segunda obra que vemos de este actor, aparte de algunas series y obras de teatro que pudimos ver en televisión, y hay que quitarse el sombrero ante su forma de actuar, y ganarse al público, incluso con esta obra del autor de El Perfume, que puede ser un poco dura.
Fueron cerca de dos horas de una gran intensidad, con un monólogo espectacular, una interpretación magistral y unos minutos finales de charla con el público ya fuera de la obra, contando anécdotas de sus actuaciones por distintos lugares y haciendo reir a todo el mundo.
Un genio. Si tenéis la oportunidad de ver alguna de sus obras no lo dudéis un segundo.
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