12 abr 2007

+ Bowie


En el post del otro día sobre David Bowie comenté que una de mis canciones favoritas es Space Oditty, y buscando la letra original encontré el siguiente texto, donde nos explican toda la historia de la canción.

Space Oddity. Publicado en 1969, apareció bajo diferentes títulos. Mientras que en el Reino Unido vió la luz bajo el nombre de “David Bowie”, en los USA fue titulado “Man of words, man of music” y en España fue incomprensiblemente traducido como “Odisea Espacial”. La magnífica reedición remasterizada actual ya presenta el título original “Space Oddity” (Rareza Espacial).

Para la grabación de Space Oddity, Bowie cuenta con sus músicos habituales en aquellos años, como son, entre otros, el pianista Rick Wakeman y el bajista Herbie Flowers (que también colaboraron con Lou Reed en sus primeros discos en solitario) o Paul Buckmaster (cuyas cuerdas también acompañaron a The Rolling Stones en el Sticky Fingers). También hacen su aparición en una pequeña colaboración los que luego serían “arañas de Marte”, Mick Ronson y Woody Woodmansey.

Como curiosidad acerca del trabajo artístico de la portada, la contraportada fue realizada por George Underwood, antiguo contrincante de Bowie en sus peleas escolares y que fue responsable del golpe que dejó a Bowie con un ojo de cada color y una de sus pupilas fijas y eternamente dilatada, como se puede apreciar perfectamente en la foto de la portada, donde aparece con un semblante serio, clavándonos su terrorífica mirada y con esos pelos que le hacen parecer una Gorgona.

El disco abre con Space Oddity, tema estrella como ya he mencionado anteriormente, auténtica joya pop. Se trata de una canción colosal, de tintes melancólicos, soberbiamente arreglada por Paul Buckmaster y magistralmente interpretada por Bowie, dándonos muestras de su gran expresividad vocal. La propia canción en sí es una representación teatral y creo que ahí radica su grandeza, la música y la voz te van transportando al espacio exterior (no, no hace falta fumar nada para sentirlo). En ella se nos narra la historia del Comandante Tom (Major Tom para los que sepan inglés), uno de esos pioneros de la carrera espacial, aunque posteriormente Bowie lo convirtiera en un yonqui en Ashes to Ashes (1980). La historia se desarrolla como un diálogo entre la estación base en Tierra y la nave espacial dirigida por nuestro héroe con esa famosa frase “Ground Control to Major Tom...”. Aunque sea un poco largo, me voy a tomar la licencia de llevaros de paseo espacial (y gratis).

Unos redobles casi militares y un bajo al que acabas acompasando el ritmo de tu corazón nos guían por la preparación del vuelo y el despegue. La voz del Control suena clara y profunda (con Bowie doblando su propia voz una escala más alta, colosal). Las órdenes son claras y concisas mientras suena la cuenta atrás:

“Estación de Tierra a Comandante Tom
Estación de Tierra a Comandante Tom
Tome sus píldoras de proteínas y póngase su casco.

10
Estación de Tierra a Comandante Tom
9, 8, 7, 6
Comenzando la cuenta atrás, motores en marcha
5, 4, 3, 2
Compruebe la ignición y que Dios esté con usted...
1, ¡¡Despegue!!”

Llegado el momento del despegue, una nota de guitarra que se desliza por el mástil a la vez que la orquesta va in crescendo haciéndote subir al espacio con el Comandante Tom. El lanzamiento ha sido un éxito, una vez arriba la cadencia del ritmo y la dulzura de las cuerdas te transmiten una sensación estática y extática: estás flotando en el espacio.

“...Aquí Estación de Tierra a Comandante Tom
Realmente ha sido un éxito
Y los periódicos quieren saber qué camisas usa.
Ahora es el momento de abandonar la cápsula si se atreve...”

Ahora es el Comandante Tom el que nos cuenta las maravillas que presencia durante su paseo espacial.

“...Aquí Comandante Tom a Estación de Tierra
Estoy saliendo por la puerta
y estoy flotando de la manera más peculiar.
Las estrellas parecen muy distintas hoy...”

Pero algo pasa, pronto le invade una sensación de infinita aflicción, ¿será la visión de nuestro maltrecho planeta? Los mensajes que llegan son muy misteriosos, se despide de su mujer con una extraordinaria dulzura en la voz. Suena punteo de guitarra autóctonamente galáctico.

“Estoy aquí sentado en una lata,
muy arriba sobre el mundo
El planeta Tierra está triste
y no hay nada que pueda hacer.

Aunque voy a más de cien mil millas,
me siento muy estático
Creo que mi nave sabe qué camino seguir
Díganle a mi mujer que la quiero, ella ya sabe.”

Corta las ataduras con la nave, iniciándose su eterna deriva por los espacios interplanetarios. En el speaker de la nave suena la voz desesperada del Control (de nuevo las tonalidades de la voz de Bowie son asombrosas).

“Estación de Tierra a Comandante Tom
Sus circuitos no funcionan, hay algo que va mal
¿Puede oirme, Comandante Tom?
¿Puede oirme, Comandante Tom?
¿Puede...?”

El comandante Tom, ajeno a esa desesperación, vaga por el vacío, mientras la música se hace cada vez más confusa y distante...

“Aquí estoy flotando alrededor de mi lata
Muy por encima de la Luna
El planeta Tierra está triste
y no hay nada que pueda hacer...”

1 comentario:

Economia internacional dijo...

llegue a tu blog buscandoinformacion mas detallada sobre uno de los simbolos de bowie..su ojo.
La verdad es que mucho mas que saber que la causante fue una riña, pocos se cuestionan sobre su ojo.

Me gustó tu escrito

http://www.monitaps.blogspot.com